Cada 17 de mayo, con motivo del Día Mundial del Reciclaje, se nos invita a reflexionar sobre nuestro papel en la construcción de un modelo de desarrollo más sostenible. Para Grupo Industrial Durandco, esta fecha no es solo un recordatorio simbólico, sino una reafirmación de nuestro compromiso con la eficiencia de recursos y el cuidado del medio ambiente.
En el sector energético, el reciclaje trasciende la simple separación de residuos. Implica diseñar procesos industriales que minimicen el desperdicio, promuevan la reutilización de materiales y garanticen una disposición final segura y trazable. Desde el reacondicionamiento de equipos hasta la gestión responsable de residuos peligrosos, cada acción cuenta.
El reciclaje también representa una oportunidad para la innovación. El reaprovechamiento de metales, polímeros, aceites y materiales electrónicos no solo reduce la presión sobre los recursos naturales, sino que también genera valor económico y fortalece cadenas de suministro circulares. En un contexto global de transición energética, donde la sostenibilidad se ha vuelto una ventaja competitiva, estas prácticas son más necesarias que nunca.
En Durandco, integramos el reciclaje como parte de nuestra estrategia de calidad, salud, seguridad y medio ambiente (QHSE). Promovemos campañas internas de sensibilización, optimizamos el uso de materiales y colaboramos con aliados certificados para asegurar una gestión responsable de todos nuestros residuos.
Reciclar no es una acción aislada; es un hábito corporativo que refleja una cultura de respeto por el entorno, eficiencia operativa y visión de futuro. Porque en cada válvula que reutilizamos, en cada tambor que limpiamos y reintroducimos al ciclo productivo, reafirmamos nuestra convicción: el desarrollo sostenible es una responsabilidad de todos.
